lunes, 30 de noviembre de 2009

PRENSA. José Viñals, poeta, en el recuerdo



En "El País", este artículo firmado por Ginés Donaire:

José Viñals, poesía y compromiso político
José Viñals está considerado uno de los escritores imprescindibles de la literatura española contemporánea. El poeta, ensayista, dramaturgo y narrador de novelas y cuentos, falleció el 27 de noviembre, a los 79 años, en Málaga, adonde había trasladado su residencia hace unos años desde Jaén, la ciudad donde recaló en 1979, primero por motivos familiares y después, políticos. Nacido en la localidad argentina de Corralito (Córdoba), en 1930, poseía un mundo lírico de gran riqueza y complejidad en el que desde un comienzo se percibía un profundo dominio de los recursos expresivos. Su obra poética, despojada de todo lo innecesario y ligada a una constante búsqueda, conmueve hasta lo inesperado.
De padres españoles (sus antepasados procedían de Losar de la Vera, en Cáceres), desarrolló en Argentina durante los años cincuenta una intensa actividad en el mundo del arte, el cine y la fotografía. Su primer libro de poesía, Entrevista con el pájaro (1969) está considerado como una obra de culto en el contexto de la pos-vanguardia lírica de Latinoamérica. Sin embargo, el gran flujo de producción y publicaciones -más de una treintena de títulos- la hizo en España, como Milagro a milagro (Hiperión, 2000), Padreoscuro (Montesinos, 1998) o He amado (La Poesía, señor hidalgo, 2006).


Ética y surrealismo


El también poeta Guillermo Fernández Rojano definía así la obra de su amigo y maestro: "Primero, un mestizaje vocacional entre la poesía y el pensamiento europeo y un compromiso político activo adquirido, en plena adolescencia, durante la dictadura de Perón, filtrado estéticamente por el surrealismo argentino, encabezado por Aldo Pellegrini, a quien Viñals consideraba un maestro". No obstante, el verdadero nutriente de su obra estaba en Rimbaud, Baudelaire, Lautrèmont, Saint-John Perse y, más lejanamente, Blake, Rilke, Novalis, Hölderlin o Ungaretti. Entre los españoles, prefería a Gamoneda, Diego Jesús Jiménez, Juan Carlos Mestre y Jorge Riechmann.
José Viñals tenía un discurso ético comprometido con la precaria condición del ser humano, la redención del hombre por medio del amor y la inevitable gravitación estética de su palabra. Hace tres años, cuando presentó su libro de poesía He amado, 11 volúmenes de temática amatoria y con la mujer como epicentro, ya dejaba clara su ideología: "La poesía si no es de izquierdas no es de vanguardia".
El pasado mes de marzo, cuando su salud ya se resentía, fue homenajeado por el Centro Andaluz de las Letras, dentro del ciclo Letras Capitales y rodeado de algunos de sus amigos y discípulos, como Juan Manuel Molina Damiani, Martín Lerma, Miguel Viribay o Dámaso Chicharro Chamorro.


Ahora, uno de sus poemas:

Lentas las piedras
y más lentos los pájaros.
Comienza el mundo
a detenerse.


El sencillo
argumento
de la vida:
libando
ha muerto
el colibrí.


Son estorbo
las vísceras.
Es estorbo
la orina.
Y la sangre.
Y el alma.
   (De Elogio de la miniatura).

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Máximo poeta, máximo ciudadano, máximo amigo. Un ser extraordinario entre los extraordinarios.

Anónimo dijo...

muchas gracias soy paula la nieta de José Viñals, de parte de mi abuela marta y la familia le damos las gracias.
http://laprofecia12-paulasarmiento.blogspot.com/